Atisbar la grandeza y el misterio de la vida nos ha llevado a vivir en búsqueda hasta que, para sorpresa nuestra, ¡hemos sido “encontradas”! Sí, encontradas por el amor desmedido de Dios, que ha marcado un antes y un después en nuestras vidas. ¡¡Él nos amó primero, Él nos soñó primero, Él nos eligió primero…!! Por eso, aunque pequeñas y frágiles, buscamos responder a su inmenso Amor de forma viva, gozosa y creativa, junto a las hermanas que Él nos ha regalado, en profunda comunión con todo y con todos.

Te invitamos a que, siempre que lo desees, cruces el umbral de esta puerta que hemos abierto para ti. Si deseas conocernos más, puedes contactar con nosotras. Nuestro mayor deseo es que el Amor de Dios te inunde y recree, dándote cada día ilusión y fuerzas renovadas para vivir. Nunca estás solo, sola, Él siempre está contigo: ¡¡Amándote…!! También nuestra silenciosa presencia te acompaña.